Del cielo azul,
bajo una mujer,
que dice “Oye tú”,
“Mío haz de ser”.
Me envolvió en ella,
en su figura de sirena,
en sus manos de seda.
Nos casaremos en un río,
que será todo turquesa,
azul con el que envolvimos,
el amor y la benevolencia.
Fuego en la sala,
nos envuelve pronto,
hizo que me castigaras,
poco a poco todo.