Ultimo día de trabajo,
pronto todo se da,
y ya solo me relajo.
Si tengo que organizarlos,
y llamarlos a mi atención,
aunque sea de pedazos,
terminare esta misión.
Perdido en el pasillo de cosméticos,
escucho el altavoz de la tienda,
“Hombre perdido e intrépido”
alguna mujer por favor que lo atienda.