Donde te pienso,
donde te añoro,
no fue un sueño,
no fue imploro.
Tocaste pronto,
luego me amaste,
me volviste loco,
y me rescataste.
Dime que me amas,
en la cocina,
tambien en la sala.
Que todo se impregne,
de tu amor, de tu ser,
que me deleite,
hasta volverte a ver.