Que frías son mis sabanas,
en esta soledad del amanecer,
no me gustan estas mañanas,
me siento loco y desvanecer.
Fin de semana y el eco de la nada,
otro inicio de primavera sin vacaciones,
estando lejos de ti mi amada,
encadenado sin tus amores.
Enviando mensajes encriptados,
que lleguen hasta la orilla del mar,
que nadie lea ni sean robados.
Solo a tu corazón quiero transmitir,
estas palabras enmieladas y bohemias,
que te acaricien y besen solo a ti.
Amanecí buscando en el lado de mi cama, buscando el calor de tu cuerpo enseguida de mi. Esperando ver tus ojos cerrados. Tus cejas tranquilas y sin expresión aun descansando para otro día de emociones, sorpresas nuevas y sentimientos encontrados. No te encontre. Estabas tal vez ya despierta muy lejos de mi, quiza ya pensando en mi mientras me tallaba los ojos. Lejos.
Señor te ruego me perdones,
me enamore de la dama de negro,
soy pendiente solo de sus amores,
ya ni la Luna ni el Sol veo.
Soy tan celoso y posesivo de ella,
que muero mil veces si alguien la mira,
y mi mano sin darse cuenta suelta.
Aunque no me mire cuando baile,
por que esta como ausente,
aunque solo me mire y no me hable,
eso para mi es suficiente.
Aunque no me crea cuando le diga “Te Amo”,
solo cree cuando lo dice su boca,
y a mi me echa por un lado.
Hay una cosa amor que te debo decir. Haz izado en mi corazón una bandera del color de tus ojos que me ha llevado a negar toda existencia de otro amor. Hay un amor tuyo que vive en mi que es el mio pero que yo te lo di primero a ti. Dime si no estoy loco por ti que por ti enloquecen mis rimas y pensamiento y mi razón. Estoy aquí tengo testigos de mi locura por ti, por que cada persona que me conoce sabe que “La otra vez estaba platicando con mi novia y..” es como comienzo casi todas mis oraciones. Por que eres como mi conciencia, mi directora de la decencia y mi parte derecha de la creación.