Hoy eres mi desayuno del corazon,
despues de comer siempre tu recuerdo,
y tenerte solo en oracion.
Eres el fruto del amor de Dios,
que me mando alguien para mi,
hemos logrado juntos los dos,
redefinir cada quien ser feliz.
Hoy me visto todo de rojo,
con la camiseta de tu serenata,
ven aqui damelo todo,
que te espero en mi ventana.
Que esperen los sentinelas,
si me hablas en los audifonos,
que se acaben las fiestas,
pero que nos dejen que platiquemos.